PROMESAS DE LIMPIEZAS INCUMPLIDAS

El 15% de la población argentina vive en la cuenca Matanza- Riachuelo. Son 5 millones de personas en riesgo sanitario por la contaminación. Cáncer, retraso mental, problemas neurológicos, hepatitis, dengue y hantavirus son algunas de las enfermedades que pueden contraerse. La última actuación eficaz para limpiar la zona con resultados reales y una actitud seria fue la que se tomó en 1871 durante la presidencia de Sarmiento, momento en que efectivamente se limpió y se erradicaron las industrias contaminantes. De 1871 en adelante, nada.

En julio de este año la Corte Suprema de Justicia de la Nación perdió la paciencia. Mediante un fallo inédito, ordenó a los tres Estados responsables - la Nación, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad- a llevar a cabo un plan de saneamiento ambiental. La Corte exigía que en un plazo de 90 días se inspeccionasen todas las empresas de la cuenca; se ejecutasen programas sanitarios específicos; y se presentasen estudios científicos sobre la calidad del aire y el agua.

Los plazos se vencieron y mucho no se hizo. Cansado de escuchar promesas incumplidas, el defensor del Pueblo de la Nación, Eduardo Mondino, y las ONG que trabajan para el saneamiento del Riachuelo pidieron a la Corte que se aplique una sanción a la Autoridad de Cuenca, que en este caso es la Secretaria de Ambiente, Romina Picolotti.

Aún no se sabe cuál será el monto de la multa, pero sí está decidido que, de aplicarse la sanción, el dinero será destinado a cumplir con los propios objetivos del fallo: mejorar la calidad de vida de los habitantes de la cuenca, recomponer el ambiente y prevenir daños futuros. Sólo resta esperar que la Corte tome la decisión.


Cecilia Crea